La Gramigna, originaria de Emilia Romagna, es un formato de pasta similar a un Bucatino corto parcialmente torcido. Con su forma recuerda la pequeña semilla de una de las más famosas plantas gramíneas.
La Gramigna es tradicionalmente acompañada con salsas a base de longanizas o ragú a la boloñesa. En general, todas las salsas de carne y a base de tomate acompañan bien a este formato.
Disponible en paquete de 500 g.